domingo, 27 de mayo de 2012

Bifobia

Me he encontrado mucha gente que niega la existencia de la bifobia. Que solo es capaz de ver la homofobia, y que creen de verdad que lxs bisexualxs solo tenemos que preocuparnos cuando nos comportamos "como homosexuales".

Aquí siguen algunos ejemplos de bifobia.

- Salir del armario con tus padres como gay o lesbiana, porque sabes que si dices que eres bisexual, te presionaran para que busques una pareja del sexo opuesto. Puede parecer homofobia (y en parte lo es), pero es importante el detalle: como gay o lesbiana los padres en cuestión se "conforman", asumen que esto es lo que hay. Muchos gays y lesbianas salen del armario como bisexuales, porque creen que es "menos grave", pero también sucede a la inversa.

- Siguiendo en la línea de salir del armario, habrá quien crea que el ejemplo que he puesto no incluye que tus padres te echen de casa. Pero no es cierto. Un ejemplo más concreto, el caso de una chica que salía con un chico, al que conocían sus padres, hasta que decidió dejarlo y empezar a salir con otra chica. La reacción de sus padres: "si fueras lesbiana lo entenderíamos, pero no lo eres, así que compórtate y déjate de tonterías de salir con chicas. O eso, o te vas de casa".

- Te gusta alguien, empiezas a salir con ese alguien, pero cuando la relación se hace mínimamente "seria", te dicen: "lo siento, pero yo no salgo con bisexuales". No, no es ciencia-ficción, es algo bastante frecuente entre gays y lesbianas. Con distintos grados: desde no querer ni el más mínimo roce, hasta el sexo sí, amor no.

- Un par de ejemplos de "asco" lésbico: aquí y aquí. (En la noticia del segundo enlace se comenta otro tema curioso, la bifobia en el lugar de trabajo, diferenciada de la homofobia)

También podría añadir los clásicos, como lo de que la bisexualidad no existe, con todas sus versiones. La idea siempre es la misma: la bisexulidad no existe porque todas las personas bisexuales en realidad son homosexuales que no se aceptan. Puede parecer una chorrada, pero que te nieguen la existencia es grave. Añade a algunos de los problemas de la homosexualidad (como enamorarte de tu mejor amigx) la confusión de no saber qué eres, puesto que lo que crees que eres, no es posible (por desconocimiento del concepto de bisexualidad, o porque lo conoces pero alguien en quien confías ciegamente te ha dicho que eso no existe).

Hace años que defiendo que la bisexualidad debe ser mostrada públicamente. Lo considero una postura política. Si es así es porque recuerdo que una vez yo también fui una adolescente confusa que no comprendía lo que sentía. Porque cuando salí del armario con mis amistades (la primera vez que daba un paso así, y me costó horrores conseguirlo) su respuesta fue: "la bisexualidad no existe". Porque no asumí mi propia orientación sexual hasta los 18 años, casi 19. Y no porque no me lo hubiera planteado nunca... Y sé que tuve suerte, otras personas lo tuvieron mucho más difícil.

No creo que sea imprescindible usar esa palabra: bisexual. Entiendo que haya a quien no le guste. Quizá si empezara ahora, con todo lo que sé, elegiría otra palabra para definirme. Pero como dije en otro momento, a mí me interesan los conceptos más que las palabras. Y sé que usando esta palabra, doy a conocer el concepto que me interesa: que existe la posibilidad de no ser heterosexual ni homosexual.

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